Blogia
ASCAN1970

El mar canario está lleno de sonidos

El mar canario está lleno de sonidos

Esta contaminación acústica puede afectar a las poblaciones de cetáceos

EFE
Santa Cruz de Tenerife

Un estudio sobre la bioacústica marina, llevado a cabo por un equipo de investigación de la Caixa, pone de manifiesto que el mar canario está lleno de sonidos, que deberán ser analizados para conocer su afección sobre la población de cetáceos que habita en aguas de las islas.

Los resultados de este estudio, realizado en las últimas ocho semanas, fueron presentados hoy por el delegado de la Caixa en Canarias, Andrés Orozco, por Miquel Vlagut, del área de Medio Ambiente y Ciencia de la Fundación la Caixa y por el biólogo Jordi Sánchez, quién manifestó que la riqueza de sonidos del mar canario "es increíble".

El biólogo, perteneciente al Centro de Recuperación de Animales Marinos, explicó que los sonidos detectados no sólo corresponden a especies marinos sino a las numerosas embarcaciones que atraviesan las islas, que son recorridas 65 veces por ferrys además de cargueros y embarcaciones de recreo.

Esta contaminación acústica, dijo el experto, puede afectar a las poblaciones de cetáceos, ya que estos animales utilizan el sonido para todas las actividades que desarrollan y que pueden ir desde su orientación hasta el apareamiento.

El especialista puso como ejemplo que el efecto que se puede producir es similar al que ocurre cuando se está durante mucho tiempo escuchando música muy alta y después hay dificultad para captar sonidos más leves.

Agregó que estos animales utilizan el sonido para todo y, debido a la contaminación acústica, pueden con el tiempo perder capacidad para oír.

Sánchez explicó que para realizar este estudio, incluido en el programa de la Caixa a favor del mar, se ha instalado por primera vez en Europa un dispositivo denominado "EARS" que permite detectar y registrar los sonidos a decenas de kilómetros de distancia.

Estos dispositivos se instalaron en boyas de la red de aguas profundas situadas en Punta de Rasca, en Tenerife, y en Punta de Sardina, en Gran Canaria.

Además, la embarcación "Vell Marí", en la que se ha desplazado por las islas la expedición científica, llevaba a bordo un hidrófono de arrastre, que registra el sonido mientras se navega.

Apuntó que se han realizado 300 horas de grabación que se tardará al menos seis meses en estudiar.

Sánchez señaló que los datos que se obtengan serán compartidos con estudios que realizan las universidades de Las Palmas de Gran Canaria y de La Laguna y será a partir de ese momento cuando se puedan obtener conclusiones sobre la contaminación acústica en la vida de las especies marinas.

No obstante, se mostró partidario de que en Canarias se haga "un santuario de cetáceos" y que se busque el equilibrio que permita la conservación de las especies marinas en las islas.

Las especies encontradas y grabadas han sido el cachalote, el delfín mular, el delfín moteado y la ballena piloto.

Sánchez indicó que por ahora no se ha encontrado el sonido perteneciente a la ballena franca, que está en peligro de extinción y que se sabe que acude a reproducirse en aguas del Sahara Occidental y cuyo sonido, dijo, tiene un canto especial.

Además de la labor científica, esta expedición tiene un carácter educativo, y así la embarcación, que ha arribado a los puertos de Arrecife, Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de La Palma, Puerto del Rosario y Santa Cruz de Tenerife, ha sido visitada por 3.000 personas, de las que más de 2.000 son escolares.

Miguel Vilagut, del área de Medio Ambiente de la Fundación de la Caixa, indicó que de lo que se trata es de dar a conocer a los escolares, entre otros aspectos, la situación del mar, las especies que están amenazada y qué es lo que se puede hacer para evitarlo.

El director territorial de la Caixa, Andrés Orozco, destacó el papel que ha desempeñado el transporte marítimo para el desarrollo de Canarias, y se mostró partidario de que haya un equilibrio entre el mismo y la conservación de los fondos marinos.

EFE
Santa Cruz de Tenerife

Un estudio sobre la bioacústica marina, llevado a cabo por un equipo de investigación de la Caixa, pone de manifiesto que el mar canario está lleno de sonidos, que deberán ser analizados para conocer su afección sobre la población de cetáceos que habita en aguas de las islas.

Los resultados de este estudio, realizado en las últimas ocho semanas, fueron presentados hoy por el delegado de la Caixa en Canarias, Andrés Orozco, por Miquel Vlagut, del área de Medio Ambiente y Ciencia de la Fundación la Caixa y por el biólogo Jordi Sánchez, quién manifestó que la riqueza de sonidos del mar canario "es increíble".

El biólogo, perteneciente al Centro de Recuperación de Animales Marinos, explicó que los sonidos detectados no sólo corresponden a especies marinos sino a las numerosas embarcaciones que atraviesan las islas, que son recorridas 65 veces por ferrys además de cargueros y embarcaciones de recreo.

Esta contaminación acústica, dijo el experto, puede afectar a las poblaciones de cetáceos, ya que estos animales utilizan el sonido para todas las actividades que desarrollan y que pueden ir desde su orientación hasta el apareamiento.

El especialista puso como ejemplo que el efecto que se puede producir es similar al que ocurre cuando se está durante mucho tiempo escuchando música muy alta y después hay dificultad para captar sonidos más leves.

Agregó que estos animales utilizan el sonido para todo y, debido a la contaminación acústica, pueden con el tiempo perder capacidad para oír.

Sánchez explicó que para realizar este estudio, incluido en el programa de la Caixa a favor del mar, se ha instalado por primera vez en Europa un dispositivo denominado "EARS" que permite detectar y registrar los sonidos a decenas de kilómetros de distancia.

Estos dispositivos se instalaron en boyas de la red de aguas profundas situadas en Punta de Rasca, en Tenerife, y en Punta de Sardina, en Gran Canaria.

Además, la embarcación "Vell Marí", en la que se ha desplazado por las islas la expedición científica, llevaba a bordo un hidrófono de arrastre, que registra el sonido mientras se navega.

Apuntó que se han realizado 300 horas de grabación que se tardará al menos seis meses en estudiar.

Sánchez señaló que los datos que se obtengan serán compartidos con estudios que realizan las universidades de Las Palmas de Gran Canaria y de La Laguna y será a partir de ese momento cuando se puedan obtener conclusiones sobre la contaminación acústica en la vida de las especies marinas.

No obstante, se mostró partidario de que en Canarias se haga "un santuario de cetáceos" y que se busque el equilibrio que permita la conservación de las especies marinas en las islas.

Las especies encontradas y grabadas han sido el cachalote, el delfín mular, el delfín moteado y la ballena piloto.

Sánchez indicó que por ahora no se ha encontrado el sonido perteneciente a la ballena franca, que está en peligro de extinción y que se sabe que acude a reproducirse en aguas del Sahara Occidental y cuyo sonido, dijo, tiene un canto especial.

Además de la labor científica, esta expedición tiene un carácter educativo, y así la embarcación, que ha arribado a los puertos de Arrecife, Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de La Palma, Puerto del Rosario y Santa Cruz de Tenerife, ha sido visitada por 3.000 personas, de las que más de 2.000 son escolares.

Miguel Vilagut, del área de Medio Ambiente de la Fundación de la Caixa, indicó que de lo que se trata es de dar a conocer a los escolares, entre otros aspectos, la situación del mar, las especies que están amenazada y qué es lo que se puede hacer para evitarlo.

El director territorial de la Caixa, Andrés Orozco, destacó el papel que ha desempeñado el transporte marítimo para el desarrollo de Canarias, y se mostró partidario de que haya un equilibrio entre el mismo y la conservación de los fondos marinos.

0 comentarios