Tenerife reciclará 70.000 toneladas de basura al año en Arico
El tratamiento comenzará en enero, una vez que hoy la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno canario entregó al Cabildo tinerfeño el acta de puesta a disposición de las instalaciones afectadas a la planta de clasificación de residuos "Todo uno" y el suministro del equipo mecánicos precisos para la compactación y transferencia de los residuos.
El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno canario, Domingo Berriel, y el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, destacaron que el objetivo es reducir el consumo de materias primas en los hogares, de modo que haya menos basura y llegue a las plantas separado.
Ricardo Melchior dijo que el acto de hoy es comenzar "otra vía, en la que el reciclaje sea algo más que declaraciones", y añadió que es preciso mentalizarse de la necesidad de seleccionar en casa la basura para no hacerlo en destino.
El director de Calidad Ambiental del Gobierno canario, José Alberto Díaz, elogió la coordinación de las administraciones en este caso, pues las competencias están repartidas entre ayuntamientos, cabildo y Ejecutivo.
La primera fase de la planta de clasificación de Arico dispone de dos líneas para tratamiento de unas 35 toneladas de residuos por hora y línea, alimentadas desde un foso de recepción con capacidad para 1.300 toneladas.
La planta clasificará de modo mecánico mediante cribas rotatorias hasta cuatro fracciones, la primera de las cuales, la orgánica, será procesada en la planta de compostaje.
El resto de fracciones será conducida a la zona de triaje manual, donde se recuperarán materias como cartón de bebida, y el rechazo del triaje pasará por un proceso de recuperación automática de los materiales férricos y no férricos.
El resto de residuos no aprovechables será compactado y transportado hasta las celdas de vertido para su depósito controlado.
Según la información facilitada por Gobierno y Cabildo, de las experiencias en plantas de similares características se estima que éstas son capaces de recuperar un 27% del contenido en materia orgánica presente en las basuras, y entre un 3 y un 7% de residuos de envases plásticos y metálicos.
En las obras se han invertido más de siete millones de euros y han consistido en la construcción de una nave de proceso que alberga la primera fase de la planta de clasificación de "Todo uno", e incluye un almacén de productos recuperados y un biofiltro para el aire de la nave.
La nave de proceso tiene una superficie aproximada de 5.900 metros cuadrados, separado en dos naves, una de las cuales tiene 128 metros de largo y 32 de ancho, y en ella se ubica el almacén de productos recuperados.
La otra nave, de descarga, tiene 68,5 metros de largo y 10 de ancho, y alberga dos fosos de recepción con una profundidad de 8,5 metros.
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