El hotel Médano se derribará parcialmente
SI LA MINISTRA de Medio Ambiente, doña Cristina Narbona, la miembro del Gobierno Zapatero más criticada y con mayor número de solicitudes de destitución, hubiera ido a Barcelona en vez de venir a Canarias, hubiera asistido en la Ciudad Condal a un "antirecibimiento" negativamente memorable. Aquí, en Canarias, y en especial en Tenerife, no le faltan motivos para ser recibida de la misma manera o peor que en tierras catalanas. Pero, de momento, no tengo noticias de ningún rechazo, aunque la ministra ha estado en lugares del litoral donde la piqueta de su Dirección General ha demolido casas y todo lo que ha encontrado que, supuestamente, no están dentro de la ley, aunque allí vivan familias que no tienen otro techo.
Doña Cristina ha dado una noticia semiconsoladora a los residentes en El Médano, a los granadilleros y a todos los tinerfeños que queremos y admirábamos la playa de El Médano y la seguimos considerando la mejor de la Isla. Ha asegurado la ministra que el hermoso hotel Médano no será demolido, como se decía, en su integridad, sino parcialmente sólo en aquella parte del inmueble construida después de suscrita la concesión administrativa que provocó el expediente de caducidad de dicha concesión por incurrir en incumplimiento. El expediente está aún pendiente de informe en el Consejo de Estado y su Departamento interviene en el litoral del Archipiélago en terrenos que exceden del dominio público en la zona marítimo-terrestre. Medio Ambiente, añadió, pretende la recuperación de esta zona en el término municipal de Granadilla. En cuanto a las construcciones privadas que también estaban afectadas por el derribo por incumplir la ley, el ministerio lo hará sólo si lo consideran oportuno el Ayuntamiento de Granadilla, el Cabildo Insular y el Gobierno de Canarias. Ella lo que plantea es el derribo parcial del hotel Médano, insistió.
O sea que nos quedamos sin un cacho de la estructura del edificio del hotel, del cual sí se ve con claridad que se ha cogido -dice doña Cristina- sin autorización un trozo de costa. Se supone que será ese pedazo de litoral el que se le quite al edificio. O sea que algo es algo, que lo ajeno no se toca y menos se fabrica encima. Y si se tratara de una casa para vivir los que no pueden pagar las enormes hipotecas, todavía, pero para hacer negocio con lo construido sobre terreno público, eso está muy feo.
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