Los asaderos son para el verano
EL CABILDO NO PROHIBIRÁ LAS BARBACOAS EN LOS LUGARES HABILITADOS
J. Barrera
Las Palmas de Gran Canaria
El decreto que el pasado año aplicó el Ministerio de Medio Ambiente para evitar los fuegos forestales no tendrá continuidad este verano «al tener fecha de caducidad», explicó el consejero de Medio Ambiente del cabildo, José Jiménez. En consecuencia, este año sí habrá asaderos.
La caducidad del Real decreto deja en manos de la Comunidad Autónoma y los cabildos la gestión de las medidas para evitar la propagación de los incendios forestales. Mientras que el decreto estatal prohibía los asaderos y la circulación de vehículos por pistas forestales para evitar los riesgos tras varios lamentables accidentes que llegaron a cobrarse varias vidas, el control del Cabildo de Gran Canaria tendrá otras exigencias.
Según explicó José Jiménez «nosotros aplicaremos el decreto correspondiente del Gobierno de Canarias que indica que se prohibe todo tipo de fuegos salvo los destinados a la preparación de alimentos en aquellos lugares acondicionados al efecto, por razones de seguridad, ya que se trata de lugares de riesgo limitado».
La isla de Gran Canaria cuenta con diez lugares donde celebrar asaderos, especialmente habilitadas para ello, desde Las Mesas, en la cumbre, hasta San José del Álamo, en la ciudad, pasando por Cruz Grande, Santa Cristina o Los Altos de San Antonio. «Creemos», dijo Jiménez, «que el verano será suave aunque estaremos alerta».
ZONAS DE ALTO RIESGO
El Cabildo de Gran Canaria se reservará en todo caso la opción de suspender cualquier tipo de fuego incluso en las zonas habilitadas si entrara en lo que denominan zonas de alto riesgo. En la Isla, precisó Jiménez, «la zona de mayor riesgo es el pinar de Inagua y su recorrido hacia Tamadaba, lugar de recuperación del pinzón azul. Lo mismo pasa con la circulación por las pistas forestales. Aún cuando esperamos un verano tranquilo, la llegada de una ola de calor nos pondría en situación de alerta y estableceríamos una vigilancia extrema en los lugares donde se use el fuego. Podemos restringir e incluso prohibir estas prácticas».
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