Medio Ambiente ha culminado el 80% de los proyectos de esta legislatura
http://www.lagacetadecanarias.net/lector.php?articulo=20080123184450
S.C. DE TENERIFE.– El consejero regional de Medio Ambiente y Ordenación Territorial, Domingo Berriel, hizo ayer un balance de su gestión al frente de la Consejería en lo que ya parece una tradición de este Gobierno: hacer un recuento de lo conseguido en estos cuatro años unos meses antes de las elecciones.
A juicio de Berriel, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial ha culminado el 80% de los proyectos previstos al inicio de la legislatura. Destacó el “importantísimo esfuerzo” hecho por su departamento para conseguir que todos los planes insulares y municipales de ordenación del territorio se hayan adaptado a las Directrices Generales de Ordenación del Territorio y del Turismo de Canarias.
Al respecto, señaló que el Gobierno canario ha puesto a disposición de los 87 ayuntamientos canarios la colaboración de la Dirección General de Ordenación del Territorio y la Dirección General de Urbanismo para la elaboración y adaptación de sus planes generales de ordenación urbana.
Para este capítulo, la Consejería ha invertido 14 millones de euros.
Domingo Berriel, que convocó la rueda de prensa con el objeto de dar a conocer la estrategia que sigue el Gobierno canario en la lucha contra el cambio climático, no ofreció dato alguno al respecto más allá de que se está llevando a cabo un censo de los centros emisores de gases con efecto invernadero en las Islas.
En este sentido, el consejero de Medio Ambiente y Ordenación Territorial, durante su larga comparecencia ante los medios de comunicación, defendió la introducción del gas natural como combustible en el Archipiélago como alternativa al uso de los derivados del petróleo, algo más contaminantes que el propio gas.
Calculó que con la introducción del gas en las Islas se podrán reducir hasta en un 30% las emisiones de gases con efecto invernadero en Canarias. Para ello reivindicó la construcción de dos puertos industriales, uno en Granadilla de Abona y otro en Arinaga, sin llegar a especificar si su departamento está a favor o no de la instalación de plantas gasificadoras en alta mar, off shore, o en tierra.
El consejero reconoció que, en lo referente a la planta gasificadora de Gran Canaria, el proyecto cuenta con la oposición “desde hace un par de años” de los municipios de la comarca Sureste contra la instalación de este tipo de infraestructura peligrosa en sus términos.
En cambio, obvió la fuerte contestación social que ha habido en Tenerife durante los últimos años contra el puerto industrial de Granadilla y su planta regasificadora, que la consideró esencial para el funcionamiento de la central térmica que se ubica en aquella zona.
En otro orden de cosas, Domingo Berriel anunció que en breve saldrán a exposición pública las directrices sectoriales en materia de calidad ambiental, residuos, paisaje y litoral. Con respecto a esto último añadió que en esta legislatura se han tramitado unos 5.000 expedientes por vertidos contaminantes al mar, de los que casi 1.880 se registraron en 2006.
Así, anunció el Plan de Contingencias de Contaminación Marina, que el Gobierno Canario pone en marcha aprovechando que la Organización Marítima Internacional (OMI)ha declarado el litoral de las Islas como Zona Marina de Especial Sensibilidad (ZMES). Recordó que, gracias a esta declaración, el Archipiélago canario dispone de dos corredores marítimos para el tráfico de mercancías peligrosas. Uno de ellos se encuentra entre Gran Canaria y Fuerteventura y el otro entre Gran Canaria y Tenerife.
Señaló que, por primera vez, se podrá controlar el tráfico marítimo que atraviesa el Archipiélago y saber qué tipo de mercancías transitan por las aguas canarias.
Con respecto a la contaminación acústica, Berriel anunció que en 2008 estará finalizado el mapa de ruido de las Islas.
Además, apuntó que se han culminado los planes de conservación y protección de especies amenazadas o sensible. Demandó al Gobierno central un mayor control en puertos y aeropuertos para evitar la introducción de especies foráneas en Canarias.
El consejero de Medio Ambiente mencionó también el decreto por el que, para cumplir con directrices europeas, se ampliarán las superficies las zonas de protección de aves (Zepas), de las que ya hay 43 con más de 67.000 hectáreas protegidas. De éstas, más de 7.000 hectáreas están en el mar.
A juicio de Berriel, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial ha culminado el 80% de los proyectos previstos al inicio de la legislatura. Destacó el “importantísimo esfuerzo” hecho por su departamento para conseguir que todos los planes insulares y municipales de ordenación del territorio se hayan adaptado a las Directrices Generales de Ordenación del Territorio y del Turismo de Canarias.
Al respecto, señaló que el Gobierno canario ha puesto a disposición de los 87 ayuntamientos canarios la colaboración de la Dirección General de Ordenación del Territorio y la Dirección General de Urbanismo para la elaboración y adaptación de sus planes generales de ordenación urbana.
Para este capítulo, la Consejería ha invertido 14 millones de euros.
Domingo Berriel, que convocó la rueda de prensa con el objeto de dar a conocer la estrategia que sigue el Gobierno canario en la lucha contra el cambio climático, no ofreció dato alguno al respecto más allá de que se está llevando a cabo un censo de los centros emisores de gases con efecto invernadero en las Islas.
En este sentido, el consejero de Medio Ambiente y Ordenación Territorial, durante su larga comparecencia ante los medios de comunicación, defendió la introducción del gas natural como combustible en el Archipiélago como alternativa al uso de los derivados del petróleo, algo más contaminantes que el propio gas.
Calculó que con la introducción del gas en las Islas se podrán reducir hasta en un 30% las emisiones de gases con efecto invernadero en Canarias. Para ello reivindicó la construcción de dos puertos industriales, uno en Granadilla de Abona y otro en Arinaga, sin llegar a especificar si su departamento está a favor o no de la instalación de plantas gasificadoras en alta mar, off shore, o en tierra.
El consejero reconoció que, en lo referente a la planta gasificadora de Gran Canaria, el proyecto cuenta con la oposición “desde hace un par de años” de los municipios de la comarca Sureste contra la instalación de este tipo de infraestructura peligrosa en sus términos.
En cambio, obvió la fuerte contestación social que ha habido en Tenerife durante los últimos años contra el puerto industrial de Granadilla y su planta regasificadora, que la consideró esencial para el funcionamiento de la central térmica que se ubica en aquella zona.
En otro orden de cosas, Domingo Berriel anunció que en breve saldrán a exposición pública las directrices sectoriales en materia de calidad ambiental, residuos, paisaje y litoral. Con respecto a esto último añadió que en esta legislatura se han tramitado unos 5.000 expedientes por vertidos contaminantes al mar, de los que casi 1.880 se registraron en 2006.
Así, anunció el Plan de Contingencias de Contaminación Marina, que el Gobierno Canario pone en marcha aprovechando que la Organización Marítima Internacional (OMI)ha declarado el litoral de las Islas como Zona Marina de Especial Sensibilidad (ZMES). Recordó que, gracias a esta declaración, el Archipiélago canario dispone de dos corredores marítimos para el tráfico de mercancías peligrosas. Uno de ellos se encuentra entre Gran Canaria y Fuerteventura y el otro entre Gran Canaria y Tenerife.
Señaló que, por primera vez, se podrá controlar el tráfico marítimo que atraviesa el Archipiélago y saber qué tipo de mercancías transitan por las aguas canarias.
Con respecto a la contaminación acústica, Berriel anunció que en 2008 estará finalizado el mapa de ruido de las Islas.
Además, apuntó que se han culminado los planes de conservación y protección de especies amenazadas o sensible. Demandó al Gobierno central un mayor control en puertos y aeropuertos para evitar la introducción de especies foráneas en Canarias.
El consejero de Medio Ambiente mencionó también el decreto por el que, para cumplir con directrices europeas, se ampliarán las superficies las zonas de protección de aves (Zepas), de las que ya hay 43 con más de 67.000 hectáreas protegidas. De éstas, más de 7.000 hectáreas están en el mar.
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