Instan a incluir la contaminación lumínica en las políticas contra el cambio climático
Los científicos participantes en la Conferencia Internacional Starlight 2007 exigieron ayer a los gobiernos que integren la reducción de la contaminación lumínica en las políticas energéticas y en los compromisos para la lucha contra el cambio climático.Éste es uno de los puntos de la declaración con la que concluyó la Conferencia Internacional en Defensa de la Calidad del Cielo Nocturno y el Derecho a Observar las Estrellas, que se ha celebrado en la isla de La Palma, organizada por el Instituto Astrofísico de Canarias, la Reserva de Biosfera de La Palma y el Gobierno canario, con el apoyo del Ministerio de Medio Ambiente y la Unesco.
La cita ha reunido a astrónomos y expertos en el medio ambiente, el turismo y la cultura de 47 países, que alertan en el texto sobre el «riesgo inminente» que supone la progresiva degradación del cielo nocturno. Los participantes exigen que el derecho a un cielo nocturno de calidad y la capacidad de observar las estrellas se equipare al resto de derechos medioambientales, sociales y culturales, «atendiendo a su incidencia en el desarrollo de los pueblos y en la conservación de la biodiversidad».
Consideran la educación «un poderoso vector capaz de invertir el divorcio creciente entre la cultura actual y la apreciación del cielo estrellado como ventana al universo», por lo que piden que la enseñanza de la Astronomía sea un contenido básico en la educación. Abogan, además, por integrar la calidad de los cielos nocturnos en las políticas de conservación de la naturaleza y de fortalecer «decididamente» la investigación científica en este ámbito.
La cita ha reunido a astrónomos y expertos en el medio ambiente, el turismo y la cultura de 47 países, que alertan en el texto sobre el «riesgo inminente» que supone la progresiva degradación del cielo nocturno. Los participantes exigen que el derecho a un cielo nocturno de calidad y la capacidad de observar las estrellas se equipare al resto de derechos medioambientales, sociales y culturales, «atendiendo a su incidencia en el desarrollo de los pueblos y en la conservación de la biodiversidad».
Consideran la educación «un poderoso vector capaz de invertir el divorcio creciente entre la cultura actual y la apreciación del cielo estrellado como ventana al universo», por lo que piden que la enseñanza de la Astronomía sea un contenido básico en la educación. Abogan, además, por integrar la calidad de los cielos nocturnos en las políticas de conservación de la naturaleza y de fortalecer «decididamente» la investigación científica en este ámbito.
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