Medio Ambiente ha enviado a analizar muestras de las palmeras enfermas y editará un folleto informat
Fuerteventura/ La consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Fuerteventura, Natalia Évora, se desplazó hoy a las dependencias del cementerio viejo de Puerto del Rosario para comprobar in situ, el estado de las cuatro palmeras afectadas por el Fusarium oxysporum, un hongo que, según explicó, “aparece como consecuencia del riego excesivo y en terrenos muy pesados, donde una absorción deficiente del suelo puede facilitar la aparición de esta enfermedad”.
Évora explicó que la propagación del hongo se produce principalmente asociado al tratamiento y el mantenimiento de las plantaciones de palmeras, “cuando en el proceso de poda las herramientas se contaminan, y en caso de que no se limpien adecuadamente pueden llegar a infectar a otras palmeras sanas”, por lo que resaltó que “no se trata en absoluto de un enfermedad virulenta, y al estar asociada a las plantaciones y la manipulación humana, no se da en ningún caso en poblaciones de palmeras silvestres”.
Cabe destacar que para proceder a realizar cualquier plantación, manipulación o traslado de palmeras en la Isla de Fuerteventura es necesario contar con una autorización de la consejería de Medio Ambiente del Cabildo Insular, que ha establecido esta medida precisamente como un sistema de control.
MEDIDAS
La titular insular de Medio Ambiente dijo que, una vez consultado a los técnicos de su consejería, el procedimiento adecuado a seguir en estos casos es “la retirada total de la palmera enferma, así como de la porción de tierra en que se asentaba”, para proceder luego al tratamiento del espacio vacío “con fungicidas y cal viva, para evitar la propagación del hongo”.
La competencia en estos casos pertenece a la entidad responsable de la plantación y el mantenimiento del palmeral, por lo que “aunque todos los ejemplares que rodean el antiguo cementerio de la capital competen al Ayuntamiento de Puerto del Rosario, hemos ofrecido nuestra total colaboración para la retirada de las palmeras muertas y el adecuado tratamiento de aquellas que se puedan recuperar”, dijo Évora.
La Consejería de Medio Ambiente editará también próximamente, en relación a este tema, un folleto relativo al buen uso de las palmeras, dirigido tanto a particulares como a los ayuntamientos de la Isla, con el propósito de servir de guía de actuación con sus respectivos espacios ajardinados. Dicho tríptico recogerá todas las normas a seguir en el tratamiento de esta especie, así como información detallada sobre el modo de actuar ante las enfermedades más frecuentes o frente a aquellas de mayor envergadura, como es el caso del picudo rojo.
Asimismo las muestras recogidas en las palmeras enfermas del cementerio han sido enviadas al laboratorio del ICIA (Instituto Canario de Investigación Agraria), donde se analizará las particularidades de una enfermedad que “con total seguridad será una cepa del Fusarium oxysporum, que si es cierto que en otros países, fuera de Canarias, ha hecho mucho daño, en su vertiente regional no presenta mayores requerimientos que un adecuado tratamiento”, explicaron fuentes técnicas de la Corporación.
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