La momia del faraón verde
G. Florido
Las Palmas de Gran Canaria
Su pirámide es el bosque y el tesoro escondido, su memoria. El pino de Pilancones perdurará embalsamado como testimonio de lo que fue. Quedará como la momia del faraón verde de Gran Canaria, el más viejo y alto que quedaba en el pinar de la Isla. El Cabildo ultima el dispositivo para su conservación.
La historia no tiene marcha atrás. El pino estaba herido de muerte y el voraz incendio del pasado verano le dio la estocada definitiva. Luego el viento hizo su trabajo y lo tumbó. Fue el 30 de enero de este año. Desde entonces yace en el suelo de este pinar tirajanero. El Cabildo, aunque quisiera, no puede resucitarlo, y ha optado por embalsamarlo, es decir, aplicarle un tratamiento especial para que perdure el mayor tiempo posible. Será una especie de fósil gigante.
Pero el proyecto no se quedará ahí. Le han cortado dos rodajas simétricas al tronco para enviar una de ellas hasta la Escuela de Montes de Madrid y extraerle toda la información que pueda arrojar sobre la edad y la vida del árbol y, por extensión, sobre las incidencias climatológicas, incendios y otras catástrofes que pudo sufrir este pinar a lo largo de los más de 400 años que se le calculan de existencia.
Sólo quedará el tronco. No había tiempo que perder, de ahí que la Corporación insular y el Gobierno de Canarias dieron esta semana los primeros pasos para conservar lo que queda del pino. Lo primero que se hizo fue descortezarlo. Según explica el técnico insular de Medio Ambiente, Juan Guzmán, «la corteza la perderá en uno o dos años y encima perjudica su preservación». Sólo quedará el tronco, sin la mayoría de sus ramas, que fueron cortadas este martes.
En una siguiente sesión se le aplicará entonces un tratamiento especial con productos elaborados a partir de derivados vegetales. Esas sustancias le harán resistente a los hongos y a los xilófagos. Basta con repetirlo cada dos años y será casi eterno.
Rodajas muy pesadas
No fue fácil cortar las rodajas en un árbol de 5,25 metros de perímetro. El Cabildo tuvo que pedir prestada una sierra de 1,05 metros. Hizo varios cortes y sacó dos lascas a una altura de 4 metros del tronco de varios cientos de kilos cada una. La tea ocupa un 60% y un ancho de 95 centímetros en un diámetro de 1,20 en cada lasca.
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